Los trabajadores suelen acudir más de lo que les gustaría a las reclamaciones de cantidad, ya sea por impago de nóminas, vacaciones o finiquito.
¿Qué es una reclamación de cantidad laboral?
Consiste en la demanda judicial que pone un trabajador a su empresa empleadora para pedir que abone la cantidad económica que le adeuda. Se trata de un mecanismo legal que se puede utilizar tanto para una relación laboral contractual (el contrato laboral está en vigor) como si el acuerdo laboral ha caducado.
Lo más común es que los empleados recurran a ella para reclamar el impago de salarios, vacaciones o indemnización por despido. En cualquiera de los casos, conviene reclamar la cantidad adeudada cuanto antes. La explicación está en que cuando inicies la demanda judicial solo podrás reclamar el dinero adeudado en los últimos 12 meses.
Cuando mantienes una relación con la empresa a la que reclamas el dinero, esta demanda te protegerá frente a despidos. Si la empresa se plantea prescindir de ti como consecuencia de la demanda, no podrá hacerlo.
Cobrar el dinero que te debe la empresa es un derecho que tienes incluso cuando has sido despedido, después de la vinculación contractual o de que hayas renunciado a tu puesto de trabajo. Eso sí, siempre que no hayas firmado un finiquito que libere a tu empresa de las obligaciones y cantidades adeudadas.
Además, podrás solicitar intereses por la cantidad que has dejado de recibir en el momento oportuno. Así lo recoge el Estatuto de los Trabajadores.
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